Esta es una referencia de integra lo que expresan programas y visiones de las agrupaciones y partidos de la Alianza UNIDAD, para enriquecer el discurso de candidatos, portavoces y dirigentes. No es un documento oficial.
CIUDAD DEL FUTURO
CONTEXTO
El Alto es, sin lugar a dudas, una de las ciudades más dinámicas y con mayor potencial de Bolivia. Con más de un millón de habitantes, su crecimiento no ha sido impulsado por políticas estatales sostenidas, ni por inversiones estratégicas planificadas, sino por la fuerza social de sus habitantes: emprendedores natos, resilientes, solidarios, profundamente comunitarios y con un fuerte ethos de superación. Esta ciudad aimara, la más importante del mundo en su tipo, es también una pieza geoestratégica clave por su ubicación en el eje La Paz–Santa Cruz y su cercanía al Pacífico.
Sin embargo, su progreso ha sido desigual. El Estado no ha sabido acompañar su expansión urbana ni potenciar sus vocaciones productivas. La ausencia de planificación metropolitana, los altos índices de informalidad, la precariedad de sus servicios básicos y de salud, y la carencia de una visión nacional que reconozca su rol estratégico han limitado las posibilidades de que El Alto ejerza el liderazgo económico, cultural y tecnológico que Bolivia necesita para avanzar en el siglo XXI.
En ese marco, la ciudad presenta una serie de desafíos estructurales: informalidad económica superior al 80%, un sistema de salud fragmentado, pobreza multidimensional en sus zonas periurbanas, oportunidades laborales precarias para los jóvenes y una institucionalidad débil. No obstante, estos desafíos son también oportunidades para una reconfiguración profunda. La propuesta de la Alianza UNIDAD para El Alto parte de este diagnóstico y plantea una intervención estructural con visión de futuro y base social sólida.
PROPUESTA
La transformación de El Alto debe orientarse por tres ejes integradores: desarrollo tecnológico y productivo, fortalecimiento institucional y cohesión social con equidad territorial. Estas son las propuestas clave:
Silicon Valley andino, un polo de tecnología y conocimiento: Se propone convertir El Alto en el mayor nodo tecnológico del país, articulando universidades, institutos técnicos y empresas emergentes. Para ello se deberá implementar:
Un Instituto Nacional de Inteligencia Artificial.
Centros de formación en programación y tecnologías emergentes.
Un parque tecnológico con empresas de ensamblaje de hardware y desarrollo de software.
Incentivos para la instalación de data centers y minería de criptomonedas con energía solar.
Infraestructura digital de alta conectividad para albergar fintechs y bancos virtuales.
Plataforma nacional de comercio exterior: El Alto se transformará en el mayor centro logístico del país, articulado al Corredor Bioceánico Central y con acceso al Puerto de Chancay (Perú). Esta plataforma debiera incluir:
Terminales intermodales de carga.
Alianzas aduaneras y comerciales con Perú y Brasil.
Infraestructura ferroviaria de enlace con Oruro y Santa Cruz.
Zona Franca y Parque Industrial Altoandino: Se instalará el parque industrial más grande del país en El Alto, con áreas productivas para textiles, alimentos orgánicos, joyería, metalmecánica y madera. Contaría con:
Beneficios arancelarios e impositivos por 10 años.
Incubadoras empresariales y centros logísticos.
Un régimen de zona franca integral, tipo Iquique o Manaos, para atraer inversión regional.
Capitalidad departamental y gobernanza efectiva: Se estudiaría la posibilidad de trasladar la sede de la Gobernación del departamento de La Paz a El Alto, como reconocimiento a su importancia demográfica, económica y simbólica. Esto permitirá:
Mayor eficiencia en la gestión departamental.
Un nuevo equilibrio institucional en el eje La Paz–El Alto–provincias.
Destino
turístico de experiencia comunitaria: El Alto será reposicionado como puerta de
entrada al altiplano turístico boliviano. Para ello se desarrollarán:
Un nuevo plan maestro del Aeropuerto Internacional.
Turismo cultural en torno a la Feria 16 de Julio, la arquitectura aimara, la gastronomía y los mercados populares.
Conexiones directas con Tihuanaco, Copacabana, Oruro y Uyuni.
Una estrategia nacional de promoción que atraiga 2 millones de visitantes adicionales por año y genere 3.000 millones USD anuales.
Educación
técnica y universidad con calidad: La UPEA será fortalecida e integrada a un
ecosistema educativo-tecnológico. Además:
Se crearán al menos 10 institutos técnicos nuevos en áreas tecnológicas, de salud y oficios especializados.
Se vinculará formación con emprendimiento mediante becas, coworks y prácticas remuneradas.
Formalización económica y nuevo modelo urbano: Se instalarán Unidades Municipales de Formalización Económica con enfoque en:
Simplificación de trámites y digitalización.
Capacitación tributaria y financiera.
Créditos blandos a microempresas.
Además, se implementarán 35 Centros Comunitarios
Ciudadanos (CCC) en barrios alteños con servicios sociales, educativos, de
salud y emprendimiento.
ACCIÓN (los primeros cien días)
Para iniciar esta transformación, se ejecutarán las siguientes acciones prioritarias:
1. Declaración de El Alto como Zona Económica y Tecnológica Especial (ZETE) y puesta en marcha del Parque Industrial Altoandino y el HUB Tecnológico del Altiplano: Se establecerá un nuevo régimen preferencial para El Alto. En paralelo, se iniciará la ejecución del Parque Industrial y del HUB Tecnológico, incluyendo la gestión de financiamiento con CAF o BID y el lanzamiento del Instituto de Inteligencia Artificial.
2. Gobernanza territorial e institucionalidad con sentido de justicia social: Se conformará el Comité Interinstitucional del Plan El Alto 2030 con participación ciudadana amplia. Además, se trasladará simbólicamente la sede de la Gobernación a El Alto, y se habilitarán tres Centros Comunitarios Ciudadanos (CCC) con servicios integrales en salud, educación y desarrollo social.
3. Formalización, emprendimiento y posicionamiento internacional de El Alto: Se implementará un Plan para capacitar y bancarizar a 10.000 emprendedores. Se lanzará la Marca “Ciudad El Alto” para promover turismo y cultura, y se iniciarán los trabajos del corredor El Alto–Chancay como conexión clave para el comercio exterior.