Esta es una referencia que integra lo que expresan programas y visiones de las agrupaciones y partidos de la Alianza UNIDAD, para enriquecer el discurso de candidatos, portavoces y dirigentes. No es un documento oficial.
UN DESTINO ÚNICO EN EL MUNDO
I. CONTEXTO
Bolivia se
encuentra en una encrucijada económica, marcada por la declinación del modelo
extractivista y una urgente necesidad de diversificación productiva. En este
escenario, el turismo emerge como uno de los sectores estratégicos con mayor
potencial de crecimiento sostenible, generación de divisas y empleo formal. A
pesar de su enorme riqueza natural y cultural, el país no ha logrado
consolidarse como un destino turístico competitivo a nivel internacional. La
falta de infraestructura, conectividad limitada, inseguridad jurídica y la
inestabilidad política han sido factores que, durante las últimas décadas, han
frenado el desarrollo pleno del sector.
Al mismo tiempo, las cifras muestran una ventana de oportunidad: de acuerdo con datos del Programa de Gobierno de la Alianza UNIDAD, el país podría captar hasta 3.000 millones de dólares anuales si se logra atraer dos millones de visitantes extranjeros adicionales. En 2019, Bolivia apenas superaba los 1,2 millones de turistas internacionales, frente a los más de 7 millones que recibía Perú y los 6 millones de Argentina. Esta brecha no responde a falta de atractivo, sino a políticas inadecuadas. Por ello se plantea una "revolución del turismo" como eje de transformación estructural del modelo económico boliviano, abandonando la dependencia de los hidrocarburos y apostando por los servicios con valor agregado.
II. PROPUESTA
Para
convertir al turismo en una verdadera industria nacional, se propone una
estrategia integral que articule inversión, innovación, infraestructura,
capital humano y gobernanza institucional, basada en seis pilares:
Financiamiento, inversión y gobernanza institucional
- Crear un Fondo de Promoción e Inversión
Turística con aportes públicos y privados, incluyendo
recursos de las regalías regionales, para financiar infraestructura,
campañas de promoción, incubadoras de emprendimiento y recuperación patrimonial.
- Incentivos fiscales temporales y líneas de
crédito preferenciales para inversiones turísticas
en zonas prioritarias (Uyuni, Madidi, El Alto, Pando, Rutas del Vino,
etc.).
- Establecimiento del Ministerio de Turismo y
Cultura, con carácter estratégico y descentralizado,
que diseñe y ejecute políticas a nivel nacional en coordinación con
gobernaciones y municipios.
Marca Bolivia y promoción internacional
- Reposicionar la imagen del país con una estrategia de “Marca Bolivia” potente, coherente y moderna,
destacando biodiversidad, herencia indígena viva, mestizaje cultural y
turismo comunitario.
- Activar el cuerpo diplomático y la diáspora
como embajadores turísticos, apoyados por campañas digitales
segmentadas y participación constante en ferias internacionales.
- Desarrollar productos turísticos integrados
con países vecinos (Perú, Chile, Brasil y Argentina), promoviendo rutas
regionales compartidas como el Qhapaq Ñan, la Ruta del Vino o los
circuitos amazónicos.
Conectividad y acceso
- Cielos abiertos y séptima libertad aérea, para facilitar la llegada de aerolíneas extranjeras y abaratar
los costos del transporte aéreo.
- Modernizar y poner en operación el aeropuerto
de Potosí, fortalecer Viru Viru como hub internacional, y desarrollar
un tren turístico Uyuni–Potosí con capital privado.
- Habilitar Puerto Busch como salida soberana
al Atlántico, en coordinación con el desarrollo de un tren de carga y
logística turística del Pantanal.
Formación, empleo y emprendimiento
- Crear el Centro Nacional de Turismo Emprendedor,
que forme guías turísticos profesionales, apoye emprendimientos
sostenibles y promueva la formalización.
- Establecer programas regionales de
capacitación en hotelería, gastronomía, guías especializados y gestión
cultural, vinculando universidades, institutos técnicos y
organizaciones comunitarias.
- Desarrollar un plan nacional de 1 millón de
emprendimientos turísticos, priorizando jóvenes, mujeres, pueblos
indígenas y regiones rurales con vocación turística.
Productos turísticos sostenibles y diferenciados
- Impulsar el ecoturismo, turismo de
aventura, de salud y comunitario, con certificación ambiental y
participación de las comunidades locales.
- Crear productos de alto valor como la “Cocina
Bolivia”, la Ruta del Vino y Singani, y la experiencia
comunitaria de El Alto como marca internacional.
- Fortalecer destinos ícono como Salar de
Uyuni, Madidi, Sucre y Potosí, con mejoras en infraestructura,
recuperación patrimonial y servicios básicos sostenibles.
Seguridad, legalidad y regulación migratoria
- Tolerancia cero a bloqueos, avasallamientos y
extorsión que afecten la operación turística.
- Fortalecer la Policía Turística y
garantizar presencia efectiva en todos los principales destinos, con
atención multilingüe y enfoque en derechos humanos.
- Reformar el sistema de visados, priorizando reciprocidad, simplificación, digitalización y
eliminación de visas ideológicas.
III. ACCIÓN (Primeros 100 días de
Gobierno)
Para dar un
impulso inmediato a la revolución turística, se proponen las siguientes
acciones prioritarias a ser ejecutadas en los primeros 100 días de gestión:
En los
primeros 100 días de gobierno, se impulsará la aprobación de una Ley de Turismo
Integral que institucionalizará un
Fondo de Inversión Turística y establecerá incentivos fiscales para fomentar la
inversión en el sector. Paralelamente, se firmarán convenios con cinco
gobernaciones clave (Potosí, La Paz, Beni, Tarija y Santa Cruz) para ejecutar
obras estratégicas de infraestructura turística y articular una política
nacional descentralizada.
Para
posicionar a Bolivia como un destino competitivo, se lanzará la campaña
internacional “Bolivia: Corazón de América”, con fuerte presencia en redes
digitales, consulados y ferias globales, mientras se inicia el programa de
cielos abiertos mediante negociaciones con aerolíneas internacionales y la
adecuación del marco jurídico. Además, se firmarán acuerdos de exención de
visado con al menos diez países estratégicos, facilitando el ingreso de
turistas y estableciendo relaciones de reciprocidad migratoria.
En paralelo,
se pondrá en marcha el Centro Nacional de Turismo Emprendedor con una primera
cohorte de 500 jóvenes capacitados en emprendimientos turísticos sostenibles, y
se comenzará la restauración del patrimonio histórico de Potosí y Sucre. Finalmente, se creará el
Observatorio Nacional de Turismo como ente técnico encargado de generar
estadísticas confiables, evaluar el impacto del sector y coordinar la implementación
de las Cuentas Satélite con el INE.